¿Rastro o Huella?

Columna Más Análisis
Por Sergio Armando López Castillo
Chihuahua, México.

Entre a más debates vaya y participe, mayor dificultad encontrará para esquivar los golpes que le tira Carlos Borruel Baquera, el candidato del PAN a la Presidencia Municipal, y en ocasiones, también, los que le propina el Dr. Gustavo Ramos.

En el segundo encuentro político organizado por el IEE a nivel municipal y la Cámara de la Radio y la Televisión del juarense Francisco Ibarra, el ex edil sustituto de Chihuahua, fue sacado de balance. Trastabilló y se vio nervioso, al grado que en su turno de dar la conclusión final del debate efectuado en la Facultad de Contaduría y Administración, en el nuevo Campus de la UACh, en lugar de desplayarse en los dos minutos de oro que le correspondían al final, sólo aprovechó uno, y el moderador Eleazar Lara – que nunca pudo pronunciar MEDIATECA-, tuvo que reconvenirlo para que completara su tiempo.


Si en el primer round en Cablemás, le dijeron “escoba vieja”, que pudo haber tapado basura en su administración interina 2002-2004, en la segunda oportunidad, el pasado lunes, el abanderado blanquiazul le reprochó que maquilló y ocultó cifras sobre seguridad pública en informes de su gobierno suplente hace tres años, en los cuales, según los datos revelados, más de 600 delitos registrados en el municipio, en esas fechas, no aparecieron en los registros oficiales, aunque sí en los hechos.

Quedándose sin poder responderle a Borruel en ese tema, el candidato tricolor también fue señalado por el aspirante panista, de que en el gobierno que dejó trunco Jorge Barousse, la ciudad de Chihuahua perdió el porcentaje más estrepitoso de su historia en materia de empleos. Eso, después de que el candidato del privilegio y de los grupos de poder, había presumido ser artífice de la creación de miles de plazas de trabajo al lado del actual gobernador del Estado.

Además, el alfil del ex gobernador que le dijera en su cara a Ernesto Zedillo –siendo éste presidente de México- “esas son fregaderas…” cuando luego de haber perdido el PRI la elección presidencial del 2000, el ex presidente quiso imponer dirigente del CEN priísta, fue señalado por Carlos Borruel, de haber vendido parques municipales cuando estuvo el frente del Edificio Municipal, cuando ahora, el ex munícipe viene hablando en su propuesta, de crear más áreas verdes en la ciudad.

En fin, parece que los estrategas que le ayudan al ex secretario de Desarrollo Industrial, en la presente campaña, no han reparado en que su candidato viene siendo vulnerable en cada uno de los debates públicos en los que toma parte. Sin embargo, otros, los más sensatos y expertos, ya comenzaron a sugerirle que no entre al juego de sus oponentes, porque de continuar así su desempeño en esos eventos de escrutinio ciudadano, terminará por caer en las encuestas, tal como le sucedió a la ex candidata a alcaldesa en 2004, Martha Laguette Lardizábal, aunque la publicidad pagada exhiba lo contrario, como ocurrió en aquella contienda.

En unos días más se avecina un tercer debate, y si en el primero y el segundo no le fue lo bien que hubiera querido, dentro del cual Borruel Baquera fue sugerente al advertir en su mensaje de conclusión que “ yo no quiero dejar RASTRO, si no dejar HUELLA en mi próximo gobierno…”, imaginemos lo que podría venirle?

Porque los terrenos del encuentro que falta, son justamente los de Carlos Borruel. En el Consejo Estatal de Participación Ciudadana (CEPAC) Borruel se sentirá en su entorno, ya que muchas de las organizaciones que conforman ese bloque ciudadano, son agrupaciones en las que de una u otra forma, Carlos Marcelino ha tenido una participación destacada, y la mayoría de esos grupos le son muy a fin.